Fermín Molina Vargas
¿Me preguntas a qué me dedico?
- En verdad de verdad… yo me dedico a ser quien soy, sin saber qué debo hacer para ser quien debo ser en un futuro; siendo que soy, sin saber quién soy ni lo que debo hacer para ser lo que quiero ser cuando ya sea lo que no soy; y , cuando sea lo que no sé si sea, quizá quiera ser lo que ahora soy: ¡Pensando ser lo que quiero ser, sin saber lo que soy!
Fermín Molina Vargas
martes, 12 de julio de 2011
LOS TRES PEREZOSOS
Tomado de mi libro de poemas "Añoranzas"
LOS TRES PEREZOSOS
En la finca “Algo es Algo”, un domingo por la mañana, mi hermano Jesús, mi primo Nicanor y yo, nos dimos cita para departir animadamente. Iniciamos comentando sucesos del momento y, poco a poco, fuimos saltando de un tema a otro. En el entusiasmo de la conversación, nos dedicamos a buscar labores fáciles pero lucrativas para un buen vivir; como a mí me gusta la ganadería, les dije que para llevar una vida holgada, lo mejor era tener un corral de vacas lecheras de dos ordeños; mi hermano Jesús no estuvo de acuerdo con la idea alegando que había mucha inseguridad y se robaban los animales; además, mantener el cercado y los pastos era muy costoso. Para rematar, Nicanor se puso de pie y espetó la ocurrencia de tener una gran bodega llena, hasta el techo, con fajos de billetes de alta nominación. Fue tan emotivo, que pasamos el resto del día discutiendo el tema; llegando al extremo de buscar calculadoras para saber cuántos fajos debían caberle a esa enorme bodega; cuántos años se necesitarían para gastar ese dinero; qué cantidad debía retirarse diariamente; en qué se debía gastar; qué medidas de seguridad debían tomarse para la protección. Para no alargar, envié estas espinelas a mi hermano y a mi primo, y todavía no me han contestado.
Los Tres Perezosos
Para mi hermano JESÚS y mi primo NICANOR MOLINA
I
Quiso la suerte reunir
A tres nobles perezosos
Quienes buscaban ansiosos
Grata forma de vivir;
Y, entre tanto discurrir,
Dijo uno: - yo quisiera
Tener finca ganadera,
Con vacunos halagüeños
Que me aporten doble ordeño
En corrales de primera -.
II
- Interrumpo – dijo airado
El segundo en la reunión –
Que es también preocupación
Atender tanto ganado,
Al servicio y al cercado;
Que el rebaño sin linderos
Se dispersa en los potreros;
Y, sin rastro ni sospecha,
Llega el vivo y se aprovecha.
¿Y quién cuida al cuidandero? –
III
- ¿Para qué tanto trabajo?
¿Para qué preocupación?
Si ya tengo solución
Sin empresas ni destajos.
Con billetes en mil fajos
En bodega almacenados
Aseaditos, fumigados;
Que perduren y me den
Los placeres al vaivén –
Dijo el otro ilusionado.
IV (Moraleja)
Es costumbre del ocioso,
En su mente tan malsana,
Discutir con frases vanas
Lo que piensa vanidoso.
Arrogante y fastidioso,
En parrandas pendencieras,
Va exponiendo a su manera
Lo que rechaza razón
Y ofreciendo a la sazón
Rienda suelta a la quimera.
FERMÍN MOLINA VARGAS
Derechos reservados
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2 comentarios:
Me declaro su fan numero #1. Su forma de escribir demuestra su sentir, como alguno que no se puede describir. Usted demuestra con sus palabras un arduo caminar, experiencias y voluntad, que hermoso es leer y conocer... no tengo palabras para usted, admirable gran logro, algo que a mi me gustaría hacer... "Felicidades"
Benjamín Molina
que dulzura de palabras
para aquel que apetito tiene
de poner las dulces mieles
al oído, y no descarta
tenerlas ya sin falta
para su sentido complacer
y volverlas a leer
para volverse perceptivo
y al elixir sensitivo
como su fin debe ser.
felicitaciones, muy Jocoso
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