Cuando tiembla la tierra, invade
el terror.
Tiembla el febril niño y la casta
doncella.
Tiembla en el cielo la rutilante
la estrella.
Tiembla la monja y bendito pecador…
Al llegar el colibrí tiembla la flor.
Tiembla la selva al retumbar la centella.
Y al temblor fugaz de ardorosa morcella,
Tiembla la pasión cuando subo
tu alcor.
Tiemblan los labios en
duraderos besos…
Si pupila tiembla al llegar
los excesos
Tiemblan temblores que conquistan la meta
Y se percibe el temblor de
la victoria
En el temblor excitante de
la gloria
Cuando tiemblo en tu entrega y tiemblas completa
FERMÍN MOLINA VARGAS
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